El aroma de la miel de albaida es floral, poco intenso y poco persistentes, con notas farináceas muy ligeras.
Su sabor es dulce sin otras notas, por lo que es una miel ideal para endulzar cualquiera de nuestros platos sin alterar su sabor.
Tiene una cristalización rápida y fina.
Este tipo de miel suelen aportar gusto dulce a todo tipo de preparaciones: bebidas frías o calientes (infusiones, refrescos, zumos… este verano tenga siempre en la nevera el clásico zumo de limón con agua y miel para refrescarse), desayunos y meriendas, helados, lácteos, pescados, carnes blancas, postres (frutas con miel. naranja, fresones, manzana, plátano, piña…)
Ingredientes
Miel de albaida